[COLUMNA] Carolina Gutiérrez: 'La forma del agua', la manera de amar

Tras los anuncios de las nominaciones a los premios Oscar, la cartelera se viste de hit, como si se tratara de una seguidilla de buenos conciertos de música o festivales de teatro. Las salas se vuelcan a poner los pergaminos de su oferta y nosotros estamos atentos a las fechas de esos estrenos, muchos de ellos luchando por lograr la famosa estatuilla dorada el próximo 4 de marzo.

Este 1 de febrero llega a nuestro país The Shape of Water (La forma del agua), película dirigida por el mexicano Guillermo Del Toro que ya ha cosechado premios como el León de Oro, en el Festival de Venecia, el Globo de Oro a Mejor Director y ahora lidera las candidaturas en los Oscar con 13 nominaciones.

Desde una primera mirada, la película perfectamente calza para ser una historia de amor protagonizada por 'Elisa '(Sally Hawkins), una mujer muda que trabaja en la limpieza en un centro de estudios científicos y una criatura (interpretada por Doug Jones), que proviene del agua y que justamente está siendo puesta a prueba en el lugar, todo ambientado en Estados Unidos de los años 60, en tiempos de la Guerra Fría.

Pero este relato va mucho más allá, Del Toro pone en vitrina el difícil camino de las personas que por una razón física, ideológica o social se sienten marginados de la comunidad y prácticamente se ven obligados a relacionarse con otros en situaciones similares. Elisa tiene una sola amiga en su trabajo llamada 'Zelda' (interpretada por Octavia Spencer), una mujer de color que enfrenta discriminación y abuso intrafamiliar y con su vecino homosexual 'Giles' (Richard Jenkins), un publicista cesante y solitario.

Un puñado de personas que construye un vínculo de complicidad para luchar muchas contra el odio racial, los inmigrantes, la violencia de género o la diversidad sexual.

Esta película si bien está ambientada en los 60´s pareciera que los temas que aborda fueran los mismos que se discuten hoy. El hermoso paseo que Del Toro nos da por su mundo de fantasía tiene la forma de una aparente y aterradora criatura, que no es otra cosa que el reflejo de ese lado monstruoso de nuestra propia humanidad, que muchas veces usa una venda para no observar la simpleza, la unión y valor con los que todos podemos construir un mundo más justo.

Y si, es una película de amor donde no importa la especie, ni el color, ni el idioma que se hable, porque muchas veces las palabras están contenidas en una mirada que no es necesario explicar.

La forma del agua es un cuento lleno de mensajes que propone leer y de una generosidad casi inalcanzable.
Disfrútenla, solo eso puedo decirles.

The Shape of Water (La forma del agua) – Director: Guillermo del Toro. Con Sally Hawkins, Octavia Spencer, Richard Jenkins y Michael Shannon. Dura 123 minutos y se estrena este 1 de febrero con calificación para mayores de 14 años.