[COLUMNA] Andrea Larrabe: 2 preguntas que cambiarán tu vida

Por Andrea Larrabe @andrealarrabe | Sabado, 8 de Julio de 2017
[COLUMNA] Andrea Larrabe: 2 preguntas que cambiarán tu vida

Louise Hay es una autora y oradora estadounidense, una de las representantes del Nuevo Pensamiento más importantes del mundo. Lo primero que me atrajo de ella fue su libro Usted puede sanar su vida, que ha vendido más de 35 millones de copias alrededor del mundo. Y se merece cada una de sus ganancias. Es un texto tan cálido y tan simple, pero que en su sencillez encierra un poder enorme.

Un poder que cada uno de nosotros tiene: los pensamientos. La idea más generalizada que existe hoy es que no tenemos control sobre lo que pensamos. Es como si estos llegaran a nuestra mente como obra de magia, saltando de un lado a otro, agrandándose, achicándose, completamente fuera de nuestro control. Por fortuna, los que elegimos nuestros pensamientos somos nosotros mismos. El problema es que nunca nadie nos enseñó a escogerlos de forma que fueran beneficiosos para nuestra felicidad.

Lo que sucede es que el pensamiento es la raíz de lo que sentimos. Cuando tenemos miedo, estamos estresados o angustiados, normalmente viene de lo que estamos pensando. Por ende, te recomiendo un ejercicio muy fácil para hacer todos los días y cada vez que te sientas mal. Cambiar los pensamientos es tema de práctica.


“¿Qué estoy pensando?”


Cuando te sientas mal, angustiada, con miedo, estresada, detente un segundo y hazte esta pregunta. Identifica el pensamiento predominante que tienes en tu cabeza. De seguro te encontrarás con alguno más o menos así: “No voy a alcanzar a terminar el proyecto de mi oficina para mañana”, “No tengo suficiente tiempo para bañar a los niños, responder los mails urgentes e ir a la junta de apoderados”, “¿En qué estaba pensando? Yo no soy capaz de hacer algo así”, “No soy lo suficientemente buena”, “¿Quién me va a querer así?” y una larga lista de etcéteras. TODOS tenemos pensamientos así. Y estos pensamientos generan una emoción que todos vivimos de forma distinta, pero que normalmente se concentra en el estómago o en el pecho. Personalmente, este tipo de pensamientos me produce dolor de estómago. No le temas. Detente, siente la emoción e identifica la idea plantada en tu cabeza que está generando ese sentimiento tan desagradable.


“¿Qué puedo pensar para sentirme mejor?”


Las emociones son respuestas a nuestros pensamientos. Cuando pasa algo en nuestra vida, la cadena es la siguiente: Mi jefe me dice que tengo media hora para entregarle un informe que es importantísimo. Eso genera un pensamiento: “Qué horror. No puedo terminarlo en ese tiempo. Es demasiado largo. No sé qué hacer”. Y ese pensamiento provoca una emoción: angustia, miedo, estrés, entre otros, que se siente y expresa en el cuerpo. Ahora, ¿qué puedes pensar para reemplazar esa idea y, por ende, la emoción? “Tranquila. Tú puedes. Lo has hecho otras veces y puedes hacerlo ahora también”, “Avanza con tranquilidad. Concéntrate. Si te demoras un poco más no pasa nada”. Y el pensamiento más poderoso de todos, que dice Brené Brown en su maravilloso libro The Gifts of Imperfection: “No importa cuánto haga hoy o cuánto deje sin hacer, yo soy suficiente”.

Etiquetas :