De "Meghan-manía" a "Huracán Markle"

Por Sole Hott @solehott | Martes, 20 de Noviembre de 2018
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Bastaron solos seis meses para que la llegada de Meghan Markle a Kensington inclinara la balanza hacia la desaprobación. Desde exigencias con sus subordinados hasta la elección de la ropa, cualquier detalle con respecto a sus decisiones o lo que diga, se ha vuelto en su contra. 

Recientemente salió una encuesta que buscaba al royal más querido por los británicos, y los número, si bien dieron a Harry como el favorito, no favorecieron a la ex actriz. Un llamado de atención que ya había sido alertado por los medios birtánicos, los cuales han apodado a Meghan como el "Huracán Markle"

Es más, este domingo recién pasado, ha sido The Mail on Sunday, el que ha publicado un reportaje que se refiere al lado B de la duquesa. El portal no solo calificó a Meghan como huracán, más que como la brisa de aire fresco que anunciaban en un comienzo, sino que además, asegura que la esposa del príncipe Harry no ha perdido el tiempo y se ha dedicado en marcar su estampa. 

Hace seis meses, una eternidad en la realeza británica, ocurrieron varios hechos históricos que llegaron de la mano de Meghan y Harry al dar el sí frente al altar. Markle no solo se conviritó en la primera mujer afro-americana en casarse con miembro de la Familia Real, sino que además, divorciada. Desde ahí el huracán solo tomó fuerzas.

El intercambio de anillos entre ambos fue el primer sismo, de muchos que vinieron y vendrían después. La duquesa tiene las cosas claras, un carácter fuerte y nadie le dice lo que tiene que hacer. Y es que suficiente le debe parecer el solo hecho de seguir todo el protocolo que ser de la realeza supone. 

El "Huracán Meghan" se despierta a las 5 de la mañana, y ha remecido todo lo que tiene que ver con las reglas, desde la vestimenta a las amistades, y desde la diplomacia hasta las etiquetas para cada situación, como cuando cerró ella misma la puerta del auto. 

Es más, sobre el vestido blanco de novia, fue la misma Reina la que se mostró sorprendida, debido a que se trataba de una divorciada. Y es comentado que debería vestirse más como una royal y menos como una estrella de Hollywood. 

Pero a la duquesa de Sussex parece no importarle, no solo utilizó solo diseñadores norteamericanos durante su gira por Oceanía, sino que además usa color negro y trajes de pantalón y chaqueta, estos dos últimos, poco aprobados por la corona británica. 

Sin embargo, los cercanos a la Familia Real, aseguran que su relación con la reina Isabel II es buena. Por otro lado, Meghan tiene al príncipe Carlos de su lado, quien aseguró que "haría cualquier cosa por Meghan".

Pero su fan úmero uno es definitivamente su marido. Es más, en el libro Charles at Seventy, el biógrafo Robert Jobson escribe que el mismo Harry estaba dispuesto a cumplir todo lo que su prometida demandara y la orden que dio fue: "Aquí se hará lo que diga Meghan".

Una fuente del palacio reveló que son de seis a siete los textos que envía Markle a sus ayudantes con sugerencias y requerimientos desde la mañana. Además, aseguran que nunca habían visto algo así, que trabaja mucho y que más allá de lo que se ve en eventos oficiales, la ex actriz tiene sus misiones secretas para conocer a la sociedad británica y en especial a los que están relacionados con obras benéficas y de orden humanitaria. Algo muy positivo y que debería equilibrar la balanza.

Aunque parece no ser sufciente, y es que entre el carácter fuerte de la "nueva" y el esfuerzo que pone en su nuevo rol junto a su marido. Sin embargo, hay pequeños detalles que no la ayudan como las renuncias de la secretaria de la pareja, Samantha Cohen y recientemente la de su asistente directa, Melissa, así com también quien era el mano derecha de Harry, Edward Lane Fox.

Ahora, por si fuera poco, se ha confirmado que Harry y Meghan están pensando en dejar el palacio de Kensington, algo que si bien tiene fines de concentrarse en sus objetivos como pareja, para los que lo miran con malos ojos lo ven como un distanciamiento entre los príncipes, liderado por la nuera del príncipe Carlos. 

Todo lo que haga o deje de hacer ha sido mencionado en este reciente artículo, las filtraciones sobre sus exigencias y comportamiento no ayudan en la aprobación de los británicos. Y dicen los expertos en realeza, que fue la misma Isabel II la que advirtió a su nieto sobre la joven, catalogándola como "difícil". 

Si es para bien, o para mal, lo que es evidente es la revelancia que ha tomado el personaje de Meghan Markle. A esto debemos sumarle que está embarazada de pocos meses y que hay un ítem de sensibilidad importante que acompaña dicho estado. Y no debemos olvidar que la revista Time, ubica a la duquesa de Sussex entre las 100 personas más influyentes del mundo. 

Pierde popularidad la "Meghan-manía", y toma fuera el "Huracán Meghan", ¿qué ocurrirá en los próximos meses?

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