[COLUMNA] Karen Uribarri: Pasos para crear un encuentro erótico

Quiero invitarte a hacer algo diferente. A llevar el sexo a otra dimensión y a sentir cómo despiertas áreas adormiladas tanto en tu cuerpo como en el de tu pareja.

Lo ideal es que previamente realicen juntos algún ejercicio de relajación, como meditar o respirar al mismo ritmo. Ojalá esto puedan hacerlo tomado de las manos y en posición de flor del loto, frente a frente.

Es importante que ambos dialoguen respecto de estos ejercicios y acuerden que serán encuentros en los que se entregarán al placer, al dar y recibir, y que NO necesariamente desembocarán en penetración. Además, es relevante entender que el buen encuentro sensual y sexual NO necesariamente es aquel en el que ambos disfrutan al mismo tiempo, sino que también podemos jugar por turnos.

Acondiciona entonces tu espacio para que esto sea cómodo y de temperatura agradable. Y preparen los cuerpos en limpieza, suavidad y aromas, para que todo sea más delicioso.

Usarán entonces el tacto, es decir, sólo la yema de los dedos. Y cuando acaricien al otro, no lo hagan sólo por hacer disfrutar a la pareja, sino que también a ustedes mismas pues se acarician la piel al tocar al otro.

Recuerden que el tacto sí puede ser apasionado y que nuestras manos producen magia. Por eso es que deben considerar que el masaje es parte del acto sexual.

Entonces, entibia tus manos con agua, elonga los dedos y relájalas. Apóyalas en tu pecho y respira profundo, liberando todo lo malo y entregándoles el poder del amor con el que le impregnarás la piel.

Tu pareja se recostará boca abajo y con tus manos recorrerás todo su cuerpo sin dejar camino ni espacio libre. Si tienes tu cabello largo, deja que éste roce su piel de modo natural, pues añadirá sensaciones. El masaje debe ser intenso, pero a ratos también delicado. Luego pídele se de vuelta y recorre la otra cara de su cuerpo. Tienes que estar atenta a sus reacciones.

Luego puedes quedarte en esas zonas que le provocaron sensaciones intensas y acercar tu respiración y aliento a su piel y vaporizarla... lentamente, sintiendo cómo cambia la temperatura de su piel.

Luego, cuando ambos hayan re-conocido el cuerpo del otro, cubran la cama con toallas o sábanas especiales, para que no manchen. Y unten sus cuerpos por completo de aceites esenciales. Ahora se masajearán cuerpo a cuerpo.

Las sensaciones que provoca el masaje CON el cuerpo son parecidas a cuando se eriza la piel, pero en muchas partes y cálidamente.

Recuéstense y uno sobre otro se masajearán de la manera y con la presión que se les ocurra. Deslícense en el cuerpo del otro y vuelvan a recordar que se acarician A SI MISMOS EN LA PIEL DEL OTRO. Es mandatorio que entiendas eso.

Este ejercicio no tiene un guión ni un tiempo. Deben dejar fluir lo que van sintiendo.

Esto ayuda mucho para prender deseos y aumentar la excitación. El juego sin tanta rigidez y sin "el deber ser de un encuentro sexual" (penetración), lo vuelve aún más estimulante y erótico.

Y no olviden los besos y en concentrarse únicamente en la conexión.