[COLUMNA] Carmen Castillo: La magia de quererse a una misma

Por Carmen Castillo @CarmenTuitera | Jueves, 8 de Septiembre de 2016
[COLUMNA] Carmen Castillo: La magia de quererse a una misma

Me gustaría contarte que llegué acá porque nací queriéndome. Pero antes de esto viví caída tras caída, creyendo muchas veces que el suelo iba a ser mi mejor amigo sin derecho a reclamarle. En mis últimos 4 años pasé de todo. Una relación tóxica, un embarazo sola, ser madre soltera, un matrimonio (el más corto de la historia) y bueno ¿dije relaciones tóxicas? (sí, más).

Hoy te lo puedo contar con humor, pero en su momento lloré y mucho, es que ver que no aprendía me desesperaba. Te juro, sentir que lo tienes todo, pero seguir fallando provoca cierta frustración que crees insuperable. Pero en vez de enfocarme en lo negativo me comencé a dar cuenta que esto yo lo tenía que pasar, esto era parte de construirme.

Pensar que nuestro destino siempre lo lleva la suerte sin realmente a enfocarnos que la suerte la construye uno me llevó a entender que esto dependía de mí. Perdonarnos poco, llorar por un pasado que marca, encontrar excusas para mantenernos en el suelo y esperar que nos levanten cuando el coraje propio debería ser el que nos saque de cada situación difícil. Nos hace seres lamentables de vez en cuando. Pero...¡tranquila! Y es ahí dónde comienza nuestro primer motivo para enfocarnos en nuestro objetivo:

Transformar lo negativo en fuerza y comenzar a quererse, sí ¡quererse!

Desde que asumí que la voy a seguir cagando, todo fue más fácil. Y es que es parte de mí y no la puedo alejar jajaja así que me digo siempre "cosa imposible de sacar de mi vida, te tomo y te sumo a mi éxito, vas aportar lo sé porque sin fracaso no hay gloria" y te resumo esto así; Quererse, es tomar lo bueno y lo malo de uno (¡Sí, lo malo!) y aprender a vivir con ellas.

Entendí 3 cosas en mis fracasos:si yo no me quiero primero no puedo exigir que otros me quieran Estoy aquí y ahora, no quiero ser recordada como la mejor amiga de suelo... quiero ser recordada como la constantemente lucho por tocar el cielo y bueno, y la última, y una de las más motivantes, las ratas no aplauden.

También asumí que era intensa como el 95% de las personas que me contactan y que no quería dejar de serlo. Se había vuelto mi motor para lograr las cosas y quién no aguante tanta intensidad no tengo por qué obligarlo estar en mi camino.

Quererse, ahí está la fuerza. Te dirán que es una frase cliché, pero te cuento un secreto, creértela sirve y te puede llevar a ser grande. En esa palabra está todo, llorar, caerse, perdonar y lo que necesites, pero no la puedes perder de vista porque justo en ella comienza la magia de brillar.

No te puedo decir que no voy a volver a fallar, porque más probable es que sí falle. Pero si sé que cada vez es menos, qué he aprendido a poner límites, he tomado el control de mi vida y tengo claro a dónde voy y por qué voy. Hoy me siento imparable, indestructible, muy humana (me carga jajaja), pero poderosa, y esto te lo quiero transmitir. Los sueños se cumplen y no dejes que tú misma te lo impida. Brilla y deja brillar.


Fotos: iStock

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