Carmen Gloria Arroyo y su historia de superación: “Nunca renuncié a mi sueño”
Carmen Gloria cuenta cómo llegó a ser una de las abogadas más querida del país y el esfuerzo que hay detrás de ello.
La Revista Sarah realizó una íntima entrevista a Carmen Gloria Arroyo, donde la abogada más reconocida de la televisión chilena repasó su vida, sus luchas y los momentos que la marcaron tanto en lo personal como en lo profesional.
El sueño que nunca soltó
Desde muy joven, Carmen Gloria soñaba con estudiar Derecho, pero las dificultades económicas la obligaron a posponer esa meta. "Salí del colegio y no habían lucas para estudiar, entonces hice cursos en secretariado, seguros, inglés, ciencias sociales... pero siempre pensé que lo iba a lograr", recuerda. Fue su entonces marido quien la motivó a dedicarse de lleno a su vocación: "Si no hubiese tomado esa oportunidad, mi vida sería completamente distinta".
La abogada más querida de Chile
Pese a los prejuicios que rodean a los abogados, Carmen Gloria se transformó en un rostro cercano y querido por el público. "Ese cariño de la gente es una compensación que recibo de la vida", asegura. Su sencillez y empatía la han llevado a conectar con miles de personas que la ven como una figura de confianza.
Casos que marcaron su historia
Su nombre comenzó a sonar con fuerza al defender a Gemita Bueno en el caso Spiniak y al asumir la defensa de Rodrigo Orias, el joven que asesinó a un sacerdote en la Catedral de Santiago. "Me decían que renunciara, que presentara objeción de conciencia, pero yo tenía que conocerlos primero. En el caso de Orias me di cuenta que era un enajenado mental y que lo justo era declararlo inimputable", explica. Gracias a su gestión, Orias recibió tratamiento y logró reinsertarse en la sociedad.
Del derecho a la televisión
Sin proponérselo, esos casos la convirtieron en un personaje mediático y abrieron la puerta a 18 años en televisión. "Jamás pensé que iba a terminar en la tele. Yo era bien perna, muy de libros, no veía programas porque no tenía tiempo", confiesa entre risas. Aunque asegura sentirse "extraña" en la industria, se convirtió en una de las figuras más reconocidas y respetadas de la pantalla.
La vida personal y las cosechas
A días de su matrimonio, Carmen Gloria asegura estar en un momento pleno: "Estoy viviendo cosechas. He cultivado mi relación de pareja, mis hijos están felices y trabajando en lo que les gusta, tengo amigos fieles. Me he sacado la cresta en la vida y ahora me toca disfrutar".
La cara dura de la exposición
La fama también le pasó la cuenta. Sus hijos sufrieron con las críticas de la farándula, en especial cuando se especuló públicamente sobre un lunar en su rostro. "Un día mi hijo lloraba y me decía 'te vas a morir y no nos dijiste'. Ese día me retiré, no fui a nada más", recuerda con dolor. Desde entonces, prefiere resguardar su vida familiar lejos de los eventos sociales.
Hoy, Carmen Gloria se define como una mujer agradecida y consciente de todo lo que ha recorrido. "No es soberbia, pero creo que tengo el derecho de disfrutar este momento de mi vida", afirma, con la serenidad de quien, después de tantos años de esfuerzo, puede finalmente saborear su propio final feliz.
[Fotos por Revista Sarah]