Gissella Gallardo se defiende de los comentarios de odio tras celebrar al presidente electo

Publicado por:
Equipo M360
Autor:M360

La periodista compartió una historia junto a Mauricio Pinilla cantando el himno nacional, lo que desató una avalancha de comentarios negativos en su contra.

Lo que comenzó como una celebración familiar terminó en una avalancha de críticas y odio. La periodista Gissella Gallardo y su pareja, Mauricio Pinilla, compartieron su alegría por el triunfo presidencial de José Antonio Kast, lo que desató una ola de ataques en redes sociales. Horas más tarde, fue la propia comunicadora quien decidió enfrentar la situación con una profunda reflexión sobre la democracia y la intolerancia.


La noche del domingo, tras confirmarse la victoria de José Antonio Kast, miles de adherentes celebraron en todo el país. Entre ellos, Gissella Gallardo y Mauricio Pinilla, quienes compartieron en sus redes sociales un video cantando el himno nacional junto a la frase "Viva Chile, mierda".


La publicación generó un enorme revuelo y un rechazo casi inmediato por parte de un sector de los usuarios, quienes llenaron sus perfiles de comentarios negativos y descalificaciones.


La reflexión de Gissella Gallardo


Lejos de borrar la publicación o guardar silencio, Gissella Gallardo decidió usar su plataforma para compartir un potente mensaje, donde lamentó la virulencia de los ataques y defendió el respeto en una sociedad democrática.


"No logro entender el nivel de odio que algunas personas expresan cuando un país decide democráticamente (...) pareciera que cuando el resultado no coincide con lo que algunos desean, se pierde el respeto, la empatía y hasta la humanidad. Se morirían las cosas que me toca leer", partió diciendo en su cuenta de Instagram.


La periodista continuó su descargo, haciendo un llamado a separar las diferencias políticas del respeto humano. "Decir cosas hirientes, desear el mal o descalificar a quienes piensan distinto no nos hace más conscientes ni más justos; solo nos vuelve más intolerantes", agregó.


Finalmente, su reflexión apuntó a la importancia del diálogo por sobre la rabia. "La democracia no se trata de ganar siempre, sino de saber convivir con resultados que no nos gustan (...) Podemos disentir, criticar y debatir con argumentos, pero nunca desde el odio. Porque cuando la rabia reemplaza al diálogo, lo que realmente pierde no es un sector político, sino la sociedad completa", concluyó.