¿Vivir en pareja engorda? Sigue estos consejos y no será un problema
Haciendo una encuesta rápida, mis amigas y hermanas confiesan que sí vieron sus rutinas alimenticias temblar ante una pareja. No siempre es fácil guardar la línea cuando se tiene al lado a un hombre que, por naturaleza, come más.
Ahora bien, si además le sumamos el hecho de vivir con la pareja, puede que la situación se complique aún más, como así lo indica un estudio realizado por la Universidad de Newcastle. Y es que hay que asumir que cuando estamos enamorado hacer todo, o casi todo, juntos es el mejor panorama, y los hábitos alimenticios son parte de ese "todo".
Pero es curioso, según otro estudio de la Universidad de Basel, las parejas casadas comen más sano que las soltera, pero aumentan de peso y practican menos deporte.
Según estos dos estudios el tener pareja se interpone en el mantener una vida saludable. Ahora bien, nos aplica en todos los casos, pero si te ves reflejada hay ciertos consejos que puede seguir para cambiar los malos hábitos.
1. Algunas reglas no hacen daño
Aunque vivan juntos los expertos aseguran que no es necesario que ambos coman lo mismo. Y además siempre es una opción encontrar interés comunes saludables como hacer algún deporte que ambos disfruten.
2. Cocinar como panorama
Para quienes disfrutan de la buena mesa, cocinar también es parte del proceso. Y muchas recetas healthy pueden volverse el mejor menú gourmet. Instagram y Pinterest son excelentes libros de cocina. Fáciles, deliciosos y con múltiples opciones para todos los gustos. Y pueden tener un día en que cocina cada uno y sorprenda al otro.
3. Todo comienza por el desayuno
"Desayunar como rey, almorzar como princesa y comer como mendigo". Esta frase es clave, y los expertos de la nutrición siempre lo recalcan. No debes comenzar el día sin desayuno y si es nutritivo verás que tu cuerpo no necesitará comer en exceso.
4. Haz que lo sano se vea rico
La clásica frase de los hombres ante lo saludable es "no voy a vivir de lechuga y tomate", pero lo que no saben es que comer sano no necesariamente significa comer solo vegetales y fruta.
5. Si no lo ves, no lo quieres
Aleja la tentación y no caerás en ella. Si no quieres caer en la barra de chocolate frente al televisor, no la tengas en tu casa. Deja esos gustos para momentos especiales. Porque a quién engañamos ¿cómo no caer en unos cuadraditos de chocolate...o más que uno?
6. Prémiate
Todo esfuerzo merece recompensa y portarse bien debe tener un premio. Tengan un día en la semana en el que además de celebrar que están juntos se "premien" por comer sano. Preparen su comida preferida, vayan al restaurant favorito o al nuevo que abrieron en la esquina. Ese día, es sin culpas. ¡Nos lo merecemos!
7. No hagan de este tema un problema
Piensen en comer sano como el solo hecho de comer y punto. Porque si ya presentas el plato como "saludable" puede que la hagas menos deseada por el otro. Casi como un castigo. Tiene que ser algo natural, de todos los días, parte de sus rutinas.
8. Paso a paso
La transición no debe ser brusca. Comiencen de a poco y vayan incluyendo los nuevos hábitos hasta que ya les resulte natural. No es una terapia de shock, es solo cuidarse entre ambos., pero disfrutando.
9. La lista del supermercado es de los dos
Esta tarea también deben hacerla juntos, así ambos se sienten parte. Y no es que uno se lo imponga al otro.
10. Mantén las proporciones
No solo en cuanto a porciones, en general, sino que además no eres él, por lo tanto no tienes que comer o beber lo mismo.
11. Más actividades outdoor
Muchas veces caemos en el creer que las citas son simplemente a restaurantes, pero hay mil formas más de pasar el tiempo juntos. Un paseo en bicicleta, una escapada al cerro o a la playa. Es solo echar a correr la imaginación.