¿Agotada de las videollamadas? ¡Hay una explicación!
Durante las primeras semanas de cuarentena canalizaste toda tu energía social y laboral a través de videollamadas para mantener comunicación con tus seres queridos y compañeros de trabajo, pero ahora sientes un cansancio difícil de identificar al hacerlo. ¿Te pasa? ¡Esto tiene una explicación!
Si bien la tecnología nos ha permitido seguir conectados con las personas, experimentar un cansancio de las videollamadas es totalmente normal.
Este tipo de comunicación a través de distintos tipos de apps exigen una concentración especial. Aunque podamos ver la cara de las personas al otro lado de la pantalla este tipo de interacción hace más difícil de interpretar todas aquellas cosas a las que estamos acostumbradas cara a cara.
Aprender a identificar rostros, gestos o tonos a través de videollamadas es especialmente agotador. Eso sin tomar en cuenta la ansiedad que implica esperar el turno para hablar y ser conscientes de que todos te están viendo y escuchando, como si estuvieras solo sobre un escenario.
Sin embargo, el cansancio de las videollamadas no sólo responde a los factores mencionados, sino también al esfuerzo que estamos haciendo al tratar de acomodarnos a esta nueva vida cotidiana que estamos construyendo y también al hecho que ahora todos los espacios donde antes nos comunicabamos con otros 8 oficina, metro, restoranes, librerías, gimnasio, etc) se reducen a un sólo ambiente: tu casa.
¿Qué hacer para reducir el cansancio sin dejar de mantenernos conectados con nuestros cercanos?
Realizar sólo videollamadas para lo más importante y limitar el tiempo de la comunicación.