Pamela Anderson sorprende con sensual sesión de fotos
Todos la recordamos corriendo por las playas de California en la emblemática serie de los años 90’s Guardianes de la Bahía. La figura de Pamela Anderson, cuando apenas tenía veinte y tantos, la elevó al sitial de sex symbol de esa década. Sin embargo hoy a sus 49 sigue dando qué hablar.
Parece que los años no han pasado por ella, algo que queda demostrado en la sesión de fotos que acaba de realizar para dar a conocer la última colección de la marca de lencería erótica Coco de Mer.
Aunque hay que reconocer las múltiples cirugías que se ha realizado, la tonificada figura que luce en las fotos no deja de llamar la atención. Pronto a cumplir 50 años, la ex chica playboy no tiene nada que envidiarle a una veinteañera.
En las fotografías en blanco y negro derrocha sensualidad, la misma con que demostraba años atrás cuando usaba el clásico traje de baño rojo de Baywatch.
El encargado de retratar a la rubia ícono de los 90’s fue el reconocido fotógrafo John Rankin, quien ya había hecho lo mismo con Madonna y Kate Moss, además de haber trabajado para campañas de Chanel y Dolce & Gabanna.
Esta no es la primera colaboración de la ex conejita con Coco de Mer. Sin ir más lejos, lo hizo el pasado San Valentín. Su perfil ha resultado perfecto para la firma, pues ella no teme ser sexy en la vida.
“La lencería no tiene que ser vista por nadie más. Es para sentirse sexy y femenina”, comentó la actriz recientemente a Revista Vogue.
Puede que este destape que protagonizó Pamela por estos días tenga alguna relación con su estado de ánimo, pues los rumores dicen que el amor ha tocado nuevamente a su puerta. Pamela reconoció que mantiene una amistad estrecha con Julian Assange, el fundador de Wikileaks, al cual conoció hace cinco meses por medio de la diseñadora británica Vivienne Westwood.
“Mi relación con él no es ningún secreto. Es una de mis personas favoritas" , comentó esta semana en sus redes. Se ha especulado mucho de este romance a causa de las variadas visitas que Anderson le ha hecho a Assange en su reclusión en la Embajada de Ecuador en Londres, donde permanece desde el 2016.
Fotos: Vanitatis