Debate sobre Will Smith en los Oscar: ¿Legítima defensa o masculinidad tóxica?
Esta mañana nadie habla de los premios que recibieron actores, directores y películas en la ceremonia de los Oscar, celebrada anoche. ¿La razón? Todos los comentarios se los ha llevado EL Momento de la velada y con eso no queremos decir que fue bueno, para nada.
Anoche, la ceremonia más importante para el cine, perdió. Si las decisiones de la Academia ya habían sido cuestionadas antes del evento, lo que ocurrió entre Will Smith y Chris Rock sobre el escenario, terminó por agregar ingredientes poco nutritivos a la jornada.
Para los que todavía no saben (si es que acaso es posible) Will Smith reaccionó de forma agresiva luego que el comediante realizara una broma sobre la apariencia calva de Jada Pinkett-Smith, esposa del actor. La mujer padece una enfermedad autoinmune llamada alopecia, razón por la cual no tiene cabello. El ganador a Mejor Actor no soportó que Rock se riera de su mujer utilizando este tema y subió al escenario, golpeó al humorista y luego le dijo "Saca el nombre de mi mujer de tu inmunda boca".
El hecho ha generado varias discusiones y debates. Por un lado hay quienes no justifican la violencia de Smith y se amparan en que Rock sólo buscaba hacer reír. Otros critican a Chris Rock por utilizar un tema de salud para sacar carcajadas. Pero hay una discusión que ha ido un poco más allá y es lo que refleja la situación sobre la sociedad actual, en especial cuando se busca erradicar el machismo. En ese contexto hay quienes ya están hablando de la "masculinidad tóxica" de Smith.
Will Smith "muestra su masculinidad tóxica al máximo, al vincularse con el otro varón (Chris Rock) desde la violencia física; y luego justificando esa reacción como una forma de amar; hablando en nombre de Jada, y resolviendo sus emociones a través de la violencia (...) Jada es revictimizada a no ser nombrada si no como "la esposa de" y al no poder excusarse ella misma al respecto o no saber si tal vez no quiere que se hable más de ella o de lo que pasó", señala el post de @roygalan compartido por @panopticodegenero.
Según este perfil de antropólogos la reacción de Will es un reflejo de la forma en que está construida la masculinidad.
"Partir la cara a otro hombre (y correr el riesgo de que otro hombre te la parta) es uno de los mandatos de la masculinidad porque un hombre se hace a sí mismo demostrando su poder físico sobre otros (...) El uso de la violencia de manera pública forma parte de la construcción de la masculinidad colectiva", agrega el post.
Es cierto que la violencia no se justifica nunca, sólo agranda los problemas, pero más allá de quedarnos en si estuvo bien o no lo hecho por Chris Rock y/o Will Smith, lo importante es poder analizar qué hay detrás de ambas acciones (hacer reír a ese costo y de golpear a alguien), pues es algo sin duda más profundo que sólo un memorable momento televisivo, es el reflejo de patrones sociales que nos determinan, que opacan, humillan y que por lo mismo muchos y muchas quieren cambiar.
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