Claudia Conserva habló de su exigente cuarentena: “Hay que aprender a delegar y pedir ayuda”
Hace dos días, Claudia Conserva confesó en redes sociales que estaba "Muerta de cansada por las labores de la casa" debido a la exigente rutina autoimpuesta que ha llevado durante el periodo de confinamiento donde se mezcla el teletrabajo, con los deberes del hogar, la necesidad de ejercitarse y la obligación de ir a la productora donde realizan el programa "Milf".
"A las 8 de la mañana saco a pasear al perro, a las 9 hago una hora de cardio de la (bicicleta) elíptica y después me pongo a limpiar. Me organicé súper bien", dijo en conversación con LUN.
La animadora asegura que los lunes son más intensos porque: "cambio las sábanas y toallas, aspiro todo el departamento, trapeo y limpio las cubiertas con limpia muebles, plancho la ropa de la semana y lavo los vidrios. El resto de la semana mantengo la limpieza. Cada dos semanas limpio la parrilla. Además, me gusta cocinar todos los días para el almuerzo y dejo algo avanzado para la noche", agregó al mismo medio.
Claudia se reconoce "maniática del orden" y que es algo que descubrió cuando vivieron en Italia, ya que era muy difícil encontrar a alguien que los ayudara con las tareas domésticas, por lo que ella decidió hacerse cargo de todo, al igual que ahora en la pandemia cuando la persona que la ayudaba con estos deberes, dejó de ir.
Si bien reconoce que Juan Carlos "Pollo" Valdivia es el encargado de cocinar en las noches y otras cosas, y que sus hijos Renato (19) y Matilda (16) se ocupan de sus piezas, admite que "es un desafío que me estimula poder hacerme cargo de todo".
A pesar de la tendinitis que la aqueja desde marzo y la insistencia del "Pollo" y sus hijos para que baje las revoluciones, se niega rotundamente y ha buscado espacios para distraerse. "Hay que aprender a delegar y pedir ayuda", cerró.