Cada uno de nosotros tiene algún recuerdo que muchas veces preferiría olvidar, borrar o eliminar definitivamente del cerebro. Sin embargo, si pensamos en algo que ayude a lograr este objetivo, solo encontramos cosas y alimentos que ayudan a 'mejorar la memoria'.
Entonces, ¿qué comer o qué hacer si lo que queremos es olvida? Solemos tomar estrategias como no pasar por un lugar que relacionamos con cierto recuerdo, borramos fotos, evitamos cumpleaños y eliminamos números de teléfono. Pero finalmente solo estamos 'evitando'.
Según los expertos en psicología este es el primer error. Volver a esos lugares o ver de nuevo a esas personas nos hace asimilar dichas emociones de malos recuerdos, atrayendo a la memoria recuerdas positivos.
Si quieres olvidar, la ciencia da algunos consejos y pasos para lograrlo efectivamente:
1. Aprovecha ese recuerdo inestable para cambiarlo
Recordar viene del latín "recordare", que significa "volver a pasar por el corazón". Lograr modificar un recuerdo es posible engañando al cerebro. Esta fase recibe el nombre de "reconsolidación de la memoria" y es cuando el cerebro reactiva un recuerdo y lo vuelve vulnerable por poco tiempo, para guardarlo de nuevo. Según un estudio de la Universidad de Nueva York, es durante ese periodo que se puede cambiar un mal recuerdo.
2. Saca al recuerdo fuera de contexto
El contexto en el que vivió el recuerdo es clave y juega un rol importante. Y esto tanto si es bueno o malo. Según los expertos, somos capaces de eliminar un recuerdo intencionalmente si cambiamos lo negativo de esa situación por estímulos positivos.
Según los psicólogos de la Universidad de Dartmouth y Princeton, solo ocurre si de verdad estamos dispuestos y queremos olvidar ese recuerdo.
3. Pensar en ello hasta que no te importe
Al reactivar un recuerdo, el cerebro también despierta las emociones, positivas y negativas, que se vinculan a el. Mientras más malo sea, mayor es la ansiedad. Esto es un mecanismo de adaptación, por lo que si recordamos constantemente ese mal recuerdo, el cerebro termina por entender que la ansiedad al respecto no sirve para nada y lo olvida.
Por ejemplo, repasar y recordar una y otra vez que tus amigos se enojaron contigo, hasta lograr aceptar que ya pasó, que no hay solución y que al final del día seguirán siendo tus amigos.
4. Enfocarte en la lección
Lo mejor que puedes hacer, según la ciencia, es analizar lo bien que estabas antes del hecho negativo, y lo catalogan como tearapia de crecimiento postraumático. Aprender de lo vivido es un excelente remedio para los malos recuerdos.
5. Escribe el mal recuerdo
Escribir sobre un recuerdo negativo es terapéutico, y así lo confirma la literatura psicológica. Traspasar al papel es parte del proceso y ayuda a superar desde estados de ansiedad a depresiones. No importa el recuerdo, dedícale un momento y escríbelo, así lo neutralizas.