Cómo entrenar a tu cerebro para pensar en positivo

Definitivamente ver el mundo y pensar de una forma positiva siempre será mejor que centrarse solo en aquellas cosas negativas que nos pasan. Además, los psicólogos confiman que este tipo de pensamiento tiene efectos beneficiosos para la salud. 

Sin embargo, no a todos los resulta fácil, y a veces es caer en el pesimismo termina siendo una costumbre. De ahí la importancia de entrenar a nuestro cerebro para pensar positivo y alejarnos de la negatividad que solo tendrá un efecto opuesto en nuestra salud. 

¿Por qué deberías pensar positivo? A falta de una, te damos seis razones...

- Es una forma de combatir el desánimo. Según estudios piscológicos, uno de los principales factores de la tristeza es el pensamiento pesimista. Si cambiamos nuestros patrones de pensamiento, el ánimo puede mejorar mucho. 

- Vivirás más tiempo. La ciencia lo confirma. Las personas positivas son menos propensas a sufrir enfermedades como la diabetes o hipertensión, por lo que viven más. Y al mismo tiempo las personas que sufren enfermedades graves, pueden llegar a cambiar su estado con un pensamiento positivo. 

- Afrontarás de mejor forma las situaciones. El tener una vivisón positiva te ayuda a relativizar la importancia de las cosas. 

- Fortalece tu sistema inmune. Si estás todo el día pensando en lo malo que te puede ocurrir, lo único qure conseguirás será debilitar tu organismo. Las emociones negativas causan mayor actividad en algunas zonas del cerebro, afectando directamente la respuesta inmune, específicamente, la debilita. 

- Aumenta la resistencia al estrés. La vida sin desafío no existe, y siempre hay que afrontar momentos tensos y decisiones complicadas. Si piensas positivo en aquellos momentos, reduces la posibilidad de caer en el estrés. Comenzar algo con el 'no vas a poder', no es positivo y mucho menos beneficioso. 

- No deja que tu pasado te limite. Un error típico es creer que tus fallas en el pasado pueden definir tu futuro, un pensamiento positivo aprende de esas equivocaciones y crea nuevas oportunidades. 

Ahora bien, esto no significa que no puedas llorar o tener un mal rato. Pero la idea es que después de pasar por eso seas capaz de levantarte y seguir adelante. 

¿Cómo activar las áreas optimistas de tu cerebro?

1. Concéntrate en tus virtudes, y trata de encontrar 3 cosas buenas de ti, por cada 1 que no te guste. 

2. Prémiate cuando hayas hecho algún esfuerzo o hayas tenido un día difícil. 

3. Da las gracias por las cosas buenas de la vida y las personas que te aportan. 

4. Entrega energía positiva, haz cumplidos y encuentra algo bueno que decirle a las personas que te rodean. 

5. Resalta lo positivo, escribe todos los días lo que te pasó durante el día, todo lo bueno sirve, incluso si disfrutaste tu chocolate favorito. 

6. Sal de tu zona de confort, cutliva amistades optimistas y rodéate de personas positivas. 

7. Practica la aceptación. Si aceptas ciertas cosas como son, será más fácil afrontarlas sin caer en el pesimismo. 

Vamos, ¡tú puedes!