"No voy al baño si no es en mi casa", un clásico de los viajes

Por Sole Hott @solehott | Martes, 7 de Agosto de 2018

Aunque tú seas de las afortunadas que no lo sufren, de seguro has estado en la conversación, clásica de viajes, que si titula "No voy al baño si no es en mi casa". Pero más allá de tener un intestino tímido o no, la verdad es que se vuelve un problema molesto. 

Y es que aunque parezca monotemático, es real. Es más, puedes ponerlo a prueba en algún viaje, siempre llegará el momento en que se toque el tema de la imposibilidad de ir al baño. Esto, porque la revelancia que tiene es mayor, incluso más importante que el dónde comer, comprar o salir a bailar. El baño fuera de casa...es un problema, y con letras mayúsculas. 

Pero, ¿por qué ocurre esto? ¿Qué es lo que le pasa a nuestro sistema digestivo? El intestino pasa de funcionar perfecto a desaparecer en acción, y aún así ser el centro de atención. 

Los viajes inlcuyen muchas cosas, no solo el relajo y la diversión. Hay cierto estrés que no se puede negar y dentro de esos está el ítem digestión. Ahora bien, aún cuando nos preocupa, la realidad es que el intestino se demora 5 minutos en salir del jetlag y actuar. Pero como el intestino es un órgano de costumbre, puede hacerse el ofendido. 

Mientras tanto tú sufres porque llevas 3 días sin ir al baño y sientes que tienes "más guata" que cuando llegaste. Y es ahí cuando el viaje se vuelve monotemático. "Ir al baño" es básicamente el nuevo objetivo, y si eres la única del grupo que no tiene tal problema y cuentas con un intestino desinhibido, serás la envidia del resto. 

La explicaicón fisiológica de esto, según los expertos, se debe a un cambio en la alimentación y en los hábitos de la rutina. No solo comemos diferente (menos frutas y verduras), sino que además a otras horas. No tomamos la misma cantidad de aguay las actividades son otras. Todo esto puede alterar el tránsito intestinal. 

La buena noticia es que hay solución y tips para lograr el objetivo "Ir al baño":

- Una técnica cuando se viaja con muchas personas, y pocos baños, es poner el despertador antes que se levante el resto.

- Desayunar café solo, tomar bebidas energéticas o comer kiwi. 

- Desayunar aguas de hierbas como llantén, regaliz, ortiga, verbena u olivo. 

- El aloe vera es una opción que muchas prefieren. 

Si bien estos consejos son más caseros, los expertos tienen sus recomendaciones alimentarias con alto contenido de fibra:

- Tomar agua, sí, los 2 litros diarios

- Verduras, dos veces al día

- Frutas, dos veces al día

- Frutos secos, un puñado al día

- Cereales integrales, pan al desayuno, o comer pastas o arroz en alguna comida

- Legumrbres, 3 a 4 porciones pequeñas (100 g) a la semana

- Semillas como el sésamo o chía, en pequeñas cantidas un día a la semana

- Yogurt, uno al día ayuda a preservar la flora intestinal










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